5:00 a.m. – El Despertar entre Montañas En las suaves colinas de Quindío, mi día comienza antes que el sol. Me levanto en una casita rodeada de naturaleza, con el sonido de un riachuelo cercano. A esta hora, el aire es fresco y la tranquilidad absoluta.

5:30 a.m. – Preparando el Día Me visto con ropa cómoda pero resistente: un sombrero de ala ancha, una camisa de manga larga para protegerme del sol y botas fuertes para el terreno irregular. En la cocina, el olor a café recién hecho llena la habitación, un pequeño placer antes de una larga jornada.

6:00 a.m. – Camino a los Cafetales Salgo de casa con la primera luz del día. El camino hacia los cafetales es mi momento de tranquilidad, donde observo el despertar de la naturaleza. A lo lejos, los primeros rayos del sol iluminan los campos, prometiendo un día claro.

7:00 a.m. – La Recolección Comienza En los cafetales, la vida bulle. Recolectores como yo, cada uno con su cesto, empezamos a seleccionar los granos de café. Esta es una labor que requiere destreza; saber cuál grano está en su punto justo de madurez es crucial.

9:00 a.m. – La Melodía del Trabajo A medida que avanza la mañana, el cafetal se llena de sonidos: el murmullo de conversaciones, el canto de los pájaros y el ruido sutil de los granos cayendo en los cestos. Es una melodía de trabajo y naturaleza.

10:30 a.m. – Momentos de Descanso El sol ya está alto, y es hora de un breve descanso. Nos reunimos bajo la sombra de un gran árbol, compartiendo historias y disfrutando de un refrigerio. Este es el momento en que la comunidad se fortalece.

11:00 a.m. – Vuelta al Trabajo Con las energías recargadas, retomamos la recolección. Cada grano que pasa por mis manos es un futuro sorbo de café en alguna parte del mundo. Esa idea me llena de orgullo y me impulsa a seguir.

1:00 p.m. – La Importancia del Almuerzo El almuerzo es un asunto serio aquí. Es un momento para nutrirse y descansar. La comida es sencilla pero deliciosa, generalmente algo que hemos cultivado nosotros mismos o que proviene de granjas locales.

2:00 p.m. – La Tarde en los Cafetales La tarde es más tranquila. El sol comienza a bajar, y la luz se vuelve dorada. Es mi momento favorito del día, donde el paisaje se transforma y todo parece brillar con una luz especial.

4:00 p.m. – Fin de la Jornada Con el atardecer acercándose, terminamos nuestra labor. Los cestos están llenos de granos rojos y fragantes. Es hora de llevarlos para su procesamiento, un paso crucial para transformarlos en el café que todos conocemos.

5:00 p.m. – Regreso al Hogar El camino de regreso a casa es de reflexión. A pesar del cansancio, hay una sensación de logro. En casa, me espera mi familia y la oportunidad de compartir cómo fue el día.

7:00 p.m. – Noche en Quindío La noche en Quindío es un tapiz de estrellas. Es un tiempo para descansar, para estar con los seres queridos, y para prepararse para otro día de trabajo y conexión con la tierra.